Gustavo Castillo y su amor por las avestruces

Con orgullo y respeto Castillo habla de lo que ha logrado en 14 años

    

    Mientras se encontraba en un hotel en España Gustavo del Jesús Castillo encendió la televisión y observó durante algunos minutos un material audiovisual sobre las avestruces, en ese momento decidió guiar los pasos de su vida hacia la cría de estas peculiares aves.

    La historia de Castillo está llena de trabajo e inspiración, posee una discapacidad que para nada le impide continuar su faena diaria, a temprana edad fue arrollado por un vehículo que le cambió la forma de ver la vida, orgulloso comenta "pasé de ser un estudiante de bachillerato de 11 puntos a ser un estudiantes universitario aplicado" con esfuerzo el señor Gustavo se graduó como Ingeniero Cívil aunque con el pasar del tiempo descubriría que su destino era otro.

Los errores del principiante

    "Toda genialidad tiene un toque de locura" afirma el Ingeniero, a su vez recuerda los primeros años criando avestruces confieza que en un principio encerraba a los pichoncitos en un baño con gran artificial sin saber que las avestruces nacen en pleno sol y con temprana edad recorren muchos kilómetros, aunque poco a poco descubrió cómo criar correctamente estas fabulosas especies. En la actualidad suma 11 años criando pichones, y con mucho animo afirma que en el último año solo se le ha muerto un solo animalito. 

Fueron más de 7 años difíciles pero siempre me dije "lo voy a lograr"

    Cargado de aprendizajes y rodeado por sus avestruces, Gustavo compartió su experiencia al frente de esta granja, actualmente busca fomentar el turismo en el poblado artesanal de Magdaleno que forma parte del municipio Zamora en el estado Aragua. Lamentablemente la granja "Avestruces Magdaleno" no está ajena a la realidad de la inseguridad del país, en semanas pasadas fueron robados 12 pichones de avestruces, pero el respeto y el reconocimiento que el Ingenriero se ha ganado en el pueblo logró que los especímenes fueran encontrados en diferentes lugares de la zona.

Entrada al pueblo de Magdaleno

    Magdaleno es reconocido por su alto nivel artesanal, en este lugar se pueden conseguir grandes obras realizadas principalmente en madera, sus pobladores (hace 15 años) no estaban habituados a los avestruces y esto desató una gran controversia cuando llegaron y sus sonidos eran escuchados a kilómetros de distancia por todo el lugar, la curiosidad popular fue tanta que se manejó la hipótesis que Castillo era dueño de varios leones, cosa que se desmintió con el tiempo y que ahora se recuerda como una hilarante anécdota.

Información General:

Costo de la entrada por persona.........Bs. 50

Alimento especial para los animales...Bs.20

Costo de los huevos............................Bs. 250

    El camino a la granja no es muy atractivo, pero darle de comer a estas aves y conversar con Gustavo, quien siempre se encuentra cuidando el lugar vale la pena; además se recomienda considerar las altas temperaturas por eso lleve agua, vestimenta apropiada para un clima cálido y si va a pasar un rato extenso no olvide la comida.

Con total confianza Gustavo da de comer a sus avestruces

  El Avestruz:

    Es un ave muy noble, solo se acercará para pedirte comida, en la granja han aprendido a usar todas sus partes, las plumas son vendidas a diseñadores, su carne es reconocida por ser de gran calidad y las cascaras de sus huevos son utilizadas para la realización de Calciostrich recomendado para tratamiento de osteoporosis, además la piel del avestruz es usada para la creación de botas.

Datos de interés: 

• Es el ave más grande que existe en la tierra
• No puede volar, pero puede correr hasta 70 km/h
• Sólo tienen dos dedos en cada pie y no tienen dientes
• Los machos son de color negro y las hembras gris y marrón
• Pesan entre 75 y 150 kg
• Pueden vivir de 35 a 40 años y hasta 50 en cautiverio
• Viven en cautividad y granjas especializadas
• Se alimentan con frutas, hierbas y semillas

Contacto:

Ing. Gustavo Castillo Cedeño.

Telf: 0414-494.51.90