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| A la entrada de Choroní la Madre María de San José |
Existen lugares que te cautivan
con solo recorrer sus calles y Choroní es uno de ellos, es un pequeño pueblo
costero ubicado en el extremo norte del municipio Girardot, su gente es de piel
tostada producto del inclemente sol al que deben hacer frente, pero que no
borra la sonrisa de quienes están dispuestos a atenderá todo aquel que desee
visitarles.
Choroní es mucho más que una
playa bonita, es un lugar con historia, tradiciones y sabores que convergen en
un mismo espacio con ansias de ser descubiertos, sus calles aun muestran la
arquitectura colonial de su génesis, casas con grandes ventanales para dar paso
a la brisa fresca del mar, con paredes pintadas de colores radiantes que reflejan
la luz llenando las calles de alegría y diferentes tonalidades.
Detrás de cada portal hay una
historia diferente, hasta santos han salido de estas tierras donde la
hospitalidad se hace notar con cada atención que los nativos de Choroní ofrecen
a sus semejantes o a foráneos; son cada vez más las personas quienes atraviesan
el Parque Nacional Henrri Piettier para disfrutar de un lugar mágico que además
posee unas características propias e irrepetibles.
Atrévete a conocer Choroní,
recorre sus calles caminando, siente el golpe de encanto que deja el mar cuando
choca con el rostro, disfruta la alegría de los lugareños y comparte la
experiencia para que los demás descubran las maravillas de este país.
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